El Ánsar común (Anser anser) se distingue del Ánsar campestre por su pico sin marcas oscuras y el plumaje pardo grisáceo, también en la cabeza y el cuello. En vuelo son características sus alas gris pálidas. Del Ánsar careto se diferencia fácilmente por carecer de la mancha blanca de la frente y de las franjas negras del vientre. La subespecie que nidifica en el este de Europa y en Rusia (A. a. rubirostris) tiene el pico rosa y la que lo hace en el oeste de Europa (A. a. anser) amarillo anaranjado. En la península Ibérica es un migrante muy común. Su ruta migratoria cruza a través de los Pirineos occidentales. También es un invernante muy común de septiembre a marzo, alcanzando su máximo de noviembre a enero, procedente de Escandinavia y Europa central. Los inmaduros llegan y se van antes que los adultos. La población invernante en España fue de 82.000 aves en enero de 1989. El número medio de invernantes entre 1978 y 1989 en Asturias, Cantabria y País Vasco fue de 72. En Cantabria es un migrante común. El paso postnupcial se produce de mediados de agosto, alcanzando su máximo en noviembre, y el prenupcial, mucho más escaso, en febrero y principios de marzo. Por el contrario, es un invernante muy escaso en la bahía de Santander, las marismas de Santoña, el Pozón de la Dolores (Camargo) y el embalse del Ebro. Observaciones publicadas: 7 aves en el censo de invernantes de 1976 en el embalse del Ebro, aquí más de 200 en los inviernos de 1997 y 1998, una el 03 y el 06.08.89 en las marismas de Parayas, bahía de Santander y unas 150 en el invierno de 1989 en el Pozón de la Dolores. Se contaron 46 aves en el censo de invernantes de enero de 1992, ninguna de ellas en el Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel. Además, se ha constatado la presencia muy escasa de aves estivales. En las Marismas de Santoña es un migrante común. El paso postnupcial se desarrolla desde septiembre y el prenupcial hasta marzo. Durante los pasos migratorios aves solitarias o pequeños grupos se posan para alimentarse y descansar. Por el contrario, es un invernante muy escaso, con 2 ejemplares de media anual y un máximo de 7 en el censo de invernantes de enero de 1987 en el período 1987-92. Posteriormente, el resultado fue de 15 aves en el censo de invernantes de enero de 1997. En las Marismas de Victoria se han observado algunas aves sedimentadas durante los pasos migratorios. Por ejemplo, una el 7 de octubre de 1989 y otra el 23 de febrero de 1992. También es un invernante muy escaso, con 8 aves en el censo de invernantes de enero de 1997 y 7 el 17 de enero de 1998.
(Extracto de mi libro "Aves marinas y acuáticas de las marismas de Santoña, Victoria, Joyel y otros humedales de Cantabria", editado en Santander en el año 2000 por la Fundación Marcelino Botín).
10 de los 52 ejemplares de Ánsar común que conté el 17 de diciembre de 2018 en los pólderes de Escalante.
Resultados del censo de aves acuáticas y marinas en el mes de enero en las Marismas de Santoña. Fuente de los datos: Sociedad Española de Ornitología.
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